Marc Aznar Soler y Carlos Díaz Motero.
Ingeniero de Telecomunicación. Responsable Garantia@COIT y Entidad de Verificación ICT del COIT e Ingeniero de Telecomunicación. Gabinete Estratégico de la Agencia Digital de Andalucía.
Competencias del Ingeniero de Telecomunicación en materia de eficiencia energética
Tras varias etapas a lo largo de la historia, la relación de los Ingenieros de Telecomunicación con el sector de la energía está en una nueva e interesante fase, tanto en la formación como en la empleabilidad. Desde el Grupo de Trabajo de Smart Efficiency (GTSE) del COIT se han analizado los planes de estudios de las universidades españolas que imparten Ingeniería de Telecomunicación, lo que ha permitido obtener una radiografía de la situación actual sobre las competencias en el sector energético.
La profesión de Ingeniero de Telecomunicación (IT) se creó en 1920. El primer el decreto de atribuciones profesionales en 1931 ya faculta a su poseedor para proyectar y dirigir la construcción y explotación de fábricas de abastecimiento o transformación de energía eléctrica cuando se utilice exclusivamente en los servicios de Telecomunicación.
Esa capacidad ha sido en numerosas ocasiones mal interpretada porque el conocimiento del uso civil de la electricidad era inherente al antecesor del Ingeniero de Telecomunicación: el Cuerpo Superior de Telegrafistas. Por ejemplo, allá por 1890 se establecía en el Reglamento Orgánico de Telégrafos que “el estudio, construcción y servicio de las líneas telegráficas estarán a cargo del Cuerpo de Telégrafos, así como las demás aplicaciones de electricidad que el Gobierno le encomiende”.
Durante muchos años estas competencias estaban olvidadas, porque la mayoría de los IT se fueron empleando principalmente en empresas de telecomunicaciones, fabricantes y consultoría.
A partir de 1998, el aumento en el número de egresados y la normativa de ICT hizo que más IT se interesasen en realizar proyectos eléctricos, de energías renovables, etc. Al presentar estos primeros proyectos eléctricos ante las ventanillas públicas, en algunos casos se produjeron rechazos, dando lugar a varios litigios de competencias profesionales que afortunadamente los tribunales fueron fallando en la mayoría de los casos a favor del IT.
Clarificar las competencias
Ya desde una perspectiva actual, y para evitar que esas situaciones volvieran a producirse, las órdenes ministeriales por las que se establecieron los contenidos de la formación universitaria de la rama de Ingeniería de Telecomunicación dejaron el tema absolutamente claro. En concreto, la Orden CIN/352/2009 y la Orden CIN/355/2009.
Desde el punto de vista de las competencias en eficiencia energética, en la primera de estás órdenes se establece como criterio común a todas las ramas de telecomunicación las siguientes capacidades:
- Comprensión y dominio de los conceptos básicos sobre las leyes generales de la mecánica, termodinámica, campos y ondas y electromagnetismo, y su aplicación para la resolución de problemas propios de la ingeniería.
- Capacidad de utilizar distintas fuentes de energía y en especial la solar fotovoltaica y térmica, así como los fundamentos de la electrotecnia y de la electrónica de potencia.
Así pues, las órdenes de 2009 vinieron a recuperar las competencias en electricidad y energía que algunos planes de estudios anteriores habían ido desplazando. Dichas capacidades, como ya se ha indicado, fueron reintroducidas con el propósito de habilitar a los futuros Ingenieros Técnicos e Ingenieros de Telecomunicación en el mercado en el ámbito de trabajo relacionado con la electricidad (electrotecnia) y la energía.
Las órdenes de 2009 vinieron a recuperar las competencias en electricidad y energía que algunos planes de estudios anteriores habían ido desplazando
Adicionalmente, el Real Decreto 822/2021, de 28 de septiembre, por el que se establece la organización de las enseñanzas universitarias y del procedimiento de aseguramiento de su calidad, estableció que “todos los títulos universitarios oficiales de Grado y de Máster Universitario deberán adscribirse a uno de los ámbitos del conocimiento relacionados en el Anexo I”, que incluye una categoría sobre ‘telecomunicación, la electricidad y la electrónica’, vinculando claramente nuestros estudios con la electricidad.
Es un hecho que cada vez más Ingenieros de Telecomunicación han orientado o pueden reorientar su carrera profesional hacia ese sector. Como dato estadístico, según el INE, con los últimos datos disponibles de 2021, el salario medio en el sector energético es de 45.462,9 euros, mientras que el del sector “información y comunicaciones” asciende a 33.225,6 euros.
El Anexo I del Real Decreto 822/2021 incluye una categoría sobre ‘telecomunicación, la electricidad y la electrónica’
Otro dato interesante es que actualmente los ingresos por visado del COIT de energía son un 10% del total. Dicho de otra forma, se genera más actividad de trabajos firmados de energía que por despliegue de redes de telecomunicación.
Análisis de los planes de estudio
Desde el Grupo de Trabajo de Smart Efficiency (GTSE) del COIT se han analizado los planes de estudios de las universidades españolas que imparten Ingeniería de Telecomunicación. Este análisis nos permite obtener una radiografía de la situación actual en la que las competencias comentadas son cubiertas. En la Figura 1 se muestra cómo los planes de estudio cubren esas competencias.
Tal y como se observa, la competencia mejor cubierta es la de ‘Campos y Ondas Electromagnéticas’. alcanzando el 100% de todos los planes analizados, y la que menos es la de ‘Capacidad de utilizar distintas fuentes de energía’, que tan sólo alcanza el 34%.
En el análisis de los planes de estudio se ha detectado que en aquellos que sí incluyen asignaturas obligatorias sobre energía, nos encontramos nombres muy dispares: ‘Energía y telecomunicaciones’, ‘Conversión y Procesado de Energía’, ‘Electrotecnia y Energía’ e ‘Infraestructuras de Energía’. En este sentido sería muy recomendable una mayor coordinación en las nomenclaturas y desvincular el uso de la energía a las telecomunicaciones para poder trabajar en el ámbito energético de forma generalista.
Cómo se abordan las competencias
Se ha analizado también en cada plan de estudios con qué tipo de formación se cubren las competencias de: Mecánica; Termodinámica; Campos y Ondas Electromagnéticas; Utilización de Distintas Fuentes de Alimentación, y Electrotecnia y Electrónica de Potencia (ver Figuras 2, 3, 4, 5 y 6). Este análisis nos permite presentar los resultados que a continuación se detallan.
Las tres primeras competencias están cubiertas fundamentalmente con créditos de formación básica, mientras que las dos últimas relacionadas con la electrónica de potencia y fuentes de energía están mayoritariamente cubiertas por créditos de formación obligatorios, si bien se detecta un cierto margen de créditos optativos que introducen el riesgo de que estas competencias no formen parte del itinerario de formación fundamental del Ingeniero de Telecomunicación en función de la elección que se realice.
Del análisis de las asignaturas que cubren las competencias también se puede establecer las siguientes conclusiones:
- Cuando está cubierta, la competencia Termodinámica lo está a través de la misma asignatura que Leyes de la Mecánica en el 100% de los casos de los planes de estudio analizados.
- La competencia Campos y Ondas Electromagnéticas se cubre en el 61% de los casos de forma exclusiva mediante asignaturas dedicadas. Esto indica que en la mayoría de los planes de estudio se le dedica una asignatura en exclusiva a nivel fundamental. Posteriormente en el 100% de los casos existen asignaturas que refuerzan o amplían estos conocimientos analizados.
- Las competencias Capacidad de Utilizar Distintas Fuentes de Energía, en especial la Solar Fotovoltaica y Térmica, y Fundamentos de la Electrotecnia y Electrónica de Potencia, están cubiertas por asignaturas de forma independiente. Sólo en el 26% de los casos la misma asignatura que cubre la segunda competencia cubre asimismo la primera.
Con el análisis de los datos públicos a los que ha tenido acceso el Grupo de Trabajo, y con objeto de que la formación del Ingeniero de Telecomunicación sea integral en cuanto a competencias, es recomendable llevar a cabo una revisión de los planes de estudio en función de la Orden CIN/355/2009.
Adicionalmente a la formación universitaria, para complementar y fortalecer las competencias necesarias en eficiencia energética (Smart Efficiency, SE), el IT debería adquirir conocimientos sobre ‘diseño y funcionamiento de instalaciones térmicas y eléctricas en edificios’, ya sea a través del COIT o de postgrados universitarios.
El conocimiento de los subsistemas que componen el edificio (instalaciones eléctricas; energías renovables; instalaciones de clima, y generación y transmisión de calor) permitiría una gestión eficiente de la energía consumida a través de su medición y control.
Aquí es donde entran en juego los conocimientos profundos en tecnología del IT, permitiendo realizar un diseño eficiente del ahorro energético en el edificio, integrando y supervisando esos subsistemas mediante un sistema de gestión de edificios (BMS, Building Management Systems), y dando lugar con todo ello al edificio inteligente (Smart Building – Inmótica).