La revista profesional sobre tecnología y transformación digital
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Javier Rodríguez Pascua

Director del Centro de Referencia Nacional de Desarrollo Informático y Comunicaciones. Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, Comunidad de Madrid.

Formación especializada contra la carencia de perfiles profesionales

Uno de los discursos más repetidos por las empresas en los últimos años es la falta de ‘talento digital’. El auge del sector hace que la mayoría de las personas con conocimientos tecnológicos se encuentren trabajando, por lo que los departamentos de recursos humanos de las corporaciones tienen cada vez más dificultades para encontrar perfiles formados.

En España contamos con un sólido sistema de Formación Profesional y una red de universidades con una oferta formativa muy completa, pero sigue habiendo una mayor oferta de puestos de trabajo técnicos que demandantes con conocimientos suficientes para cubrirlos.

Dentro del sistema de Formación Profesional existe una oferta formativa reglada, conocida por la mayoría de los ciudadanos, que son los diferentes ciclos formativos de todas las familias profesionales, y la oferta formativa para el empleo, quizá menos conocida, pero que te permite acceder al mercado laboral de una forma más rápida. Este gran ‘desconocido’ para los perfiles más técnicos o ingenieriles es el que se pretende sacar a la luz en este artículo, como herramienta de choque ante la falta de perfiles profesionales. No son ‘formaciones milagro’ que te prometen ser ingeniero en dos semanas, sino cursos muy especializados con una alta inserción laboral, algunos de ellos introductorios a los diferentes sectores y otros de reciclaje para personas que lleven trabajando un tiempo con dichas tecnologías. Incluso puedes programar tu itinerario formativo partiendo de niveles inferiores con más horas de formación, o en niveles superiores porque ya tienes experiencia profesional o conocimientos adquiridos por otros medios, que te darán acceso a formaciones más exigentes.

Sigue habiendo una mayor oferta de puestos de trabajo técnicos que demandantes con conocimientos suficientes para cubrirlos

Centros de Referencia Nacional
Como indica el portal de TodoFP del Ministerio de Educación y Formación Profesional, los Centros de Referencia Nacional (CRN) son “centros públicos que realizan acciones de innovación y experimentación en materia de formación profesional, especializados en los diferentes sectores productivos a través de las familias profesionales”. En este caso, el CRN en Desarrollo Informático y Comunicaciones de la Comunidad de Madrid es uno de los actores encargados de realizar estas tareas en el sector de las telecomunicaciones.

Con unas instalaciones de más de 6.000 metros cuadrados y un volumen de 215 cursos y 3.575 alumnos cada dos años, el centro mantiene su oferta formativa a la vanguardia de las últimas tecnologías. Además, en pocos años se han realizado más de cien masterclass, por las que han pasado ponentes y empresas que han desarrollado proyectos de renombre, como los encargados de gestionar la telemetría y todas las comunicaciones a nivel mundial del proyecto Stratos (primer salto estratosférico), entre otros. También se realizan estudios de detección de necesidades formativas de profesores y del sector en general, alimentando el catálogo de formaciones del Servicio de Empleo Público Estatal, para que puedan ser impartidas en todo el territorio nacional. Incluso se realizan proyectos europeos de diferente índole.

 

Como Centro de Referencia Nacional en Desarrollo Informático y Comunicaciones, el CRN es el encargado de colaborar con diferentes organismos, sector productivo y agentes sociales, para mantener un tejido de formaciones en este sector, potentes, actualizadas y acordes a lo que demandan las empresas.

Estudios de mercado y detección de necesidades
Pero ¿y cómo se sabe por dónde va un sector tan cambiante? Hay diferentes herramientas a explotar, no dejando nada a la improvisación.

La primera y más cercana al sector es la firma de convenios de colaboración con empresas punteras. Marcas tan reconocibles como Microsoft, Sap, Oracle, RedHat, y hasta 23 tecnologías diferentes, colaboran con el CRN en la prescripción del futuro de la tecnología y nos ayudan a crear nuevas acciones de todo tipo.

También existen los Observatorios de Ocupaciones, tanto del Servicio de Empleo Público Estatal, como el propio de la Comunidad de Madrid, en este caso. Todos los años se generan unos informes con los resultados de la prospección de los diferentes sectores, aprovechando estos datos para detectar las carencias más urgentes que cubrir.

El CRN, por su lado, también realiza estudios de mercado, detección de necesidades de formación de profesorado del sector que nos ocupa, mesas de trabajo con expertos, jornadas técnicas, etc. Dichas acciones no son una duplicidad de los anteriores, sino que afinan más en las necesidades de determinadas tecnologías muy concretas y de reciente aparición en el mercado, como puede ser el edge computing, la Inteligencia Artificial o todo lo que hay alrededor de la tecnología 5G.

Y, por supuesto, se consultan las demandas de empleo sin cubrir, para finalmente cruzarlas con los perfiles que hay en desempleo y cerrar el círculo de información que alimentará el siguiente paso, la creación de nuevas acciones formativas que nos permitan generar talento para cubrir las demandas del sector.

El Centro de Referencia Nacional en Desarrollo Informático y Comunicaciones de la Comunidad de Madrid ofrece 215 cursos a la vanguardia de las últimas tecnologías

Nuevas formaciones
De media se generan y actualizan en el CRN más de 70 nuevas especialidades, centradas en desarrollo informático y comunicaciones, cada dos años. Todas estas formaciones se incluyen en el catálogo de especialidades del Servicio de Empleo Público Estatal, para que cualquier Comunidad Autónoma, con fondos públicos, subvenciones, etc., pueda impartir las mismas formaciones que en el Centro de Referencia Nacional.

Actualmente se cubren diferentes perfiles profesionales dentro de tecnologías tan punteras como Big Data, cloud computing, edge computing, ciberseguridad, videojuegos, realidad virtual, y un largo listado que puede ser consultado en esta web: https://cftic.centrosdeformacion.empleo.madrid.org/cursos-2022-2024.

Proyectos internacionales
El CRN salta fronteras, y también participa y lidera proyectos en la Unión Europea de diferente índole. Desde las movilidades de Erasmus+ conocidas por la mayoría de la población, hasta el proyecto KA2 de asociaciones estratégicas o los más potentes Skill Alliance.

 

Cuando nadie hablaba de transformación digital, entre el 2015 y 2018, el CRN lideró el proyecto Cisoss (Cloud and Internet Services with Open Source Software for small and medium enterprises), en nuestro intento de ayudar a las Pymes en su transformación digital. Este proyecto está enmarcado dentro del programa Erasmus+ de Asociaciones Estratégicas y en él participaron organizaciones de Noruega, Reino Unido (antes del Brexit), Suecia y España.

Entre 2016 y 2019 se crea la eCFAlliance (e-Competences Framework Alliance), liderada por la Universidad de Milán, que invita al CRN a participar y aportar su conocimiento en formaciones, cualificaciones profesionales, etc., trabajando en el desarrollo de 15 de las 40 competencias digitales definidas por la Unión Europea. En este proyecto llegaron a participar 18 organizaciones de cinco países diferentes.

En la actualidad y durante los próximos dos años, el CRN participa en un proyecto liderado por la Universidad de Patras en Grecia sobre Smart Cities y lidera uno relacionado con el Green Computing, por lo que la presencia en Europa está garantizada.

Un ejemplo: proyecto 5G
Después de encajar todos los engranajes ya comentados en el presente artículo, el lector podrá imaginar el volumen de acciones de innovación educativa que realiza el CRN. Como caso de uso y a modo de ejemplo, veamos los pasos dados hasta conseguir ese talento en una tecnología tan novedosa como es el 5G.

Antes de la pandemia, el Ministerio de Empleo por medio del Servicio de Empleo Público Estatal, se puso en contacto con el CRN para expresarle su preocupación por el inminente despliegue de tecnología 5G para dar cobertura a los nuevos dispositivos y la falta de personal cualificado para su realización.

Cada año se realizan diversas acciones para detectar las necesidades reales y las carencias más urgentes que cubrir

Desde el CRN se solicita al Ministerio seguir una serie de pasos, para estudiar en profundidad el problema y aportar una propuesta de solución, a lo que se responde positivamente y, además, se nos ofrece la ayuda de DigitalES (Asociación Española para la Digitalización), que rápidamente nos pone en contacto con todos los actores de esta tecnología. Dan comienzo las reuniones con fabricantes de hardware, empresas de servicios, operadores telefónicos y centros de investigación para recopilar toda la información sobre el estado actual de la tecnología, formaciones existentes y demanda real de perfiles profesionales.

Una de las primeras conclusiones del estudio arroja que el despliegue no es tan inminente, sino que se realizará a lo largo de varios años, y que hay una carencia importante de docentes con conocimientos en 5G, por lo que se crean dos cursos para formadores, uno basado en el perfil de instalador y otro de servicios sobre la red. Pero dichas formaciones requieren contar con una antena real que incluya todas las tecnologías dentro de 5G, y que permita a los formadores conocer de cerca todos los elementos y los controle al 100%. El Ministerio, muy motivado con el proyecto, financia la compra de la primera antena de 5G real en un centro de formación, el CRN, y comienzan las formaciones de más de un centenar de docentes en diferentes convocatorias.

Meses después, y contando con una cantera importante de docentes, se programan acciones de formación para trabajadores en situación de desempleo de la Comunidad de Madrid, se crea el curso de especialización de Formación Profesional sobre 5G, se realizan talleres de radiodifusión con institutos y universidades de toda España que quieren hacer prácticas reales con esta tecnología, y se empiezan las conversaciones con las empresas instaladoras, que agradecen el contacto con las personas formadas concretamente en esta tecnología.

En definitiva, proyecto a tres pasos: detección y estudio de la necesidad, creación de formaciones y generación de talento, y puesta en contacto de dicho talento con las empresas que lo necesitan.

 

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